Robótica y sistemas autónomos para la gestión inteligente de procesos y recursos
AER Automation » automation_review » Robótica y sistemas autónomos para la gestión inteligente de procesos y recursos
- By Automation Review
- May 28, 2021
- 7:04 am
GMV propone impulsar la transición sostenible y digital por medio de la automatización, la digitalización y la ciberseguridad

La recuperación económica que ha empezado es una oportunidad para construir una economía para crear un futuro más sostenible y resiliente. Será posible gracias a dos transiciones: la verde y la digital. Por ello, la innovación sigue avanzando hacia una mayor hiperconectividad e hiperautomatización de la industria con tecnologías como la robótica, la inteligencia artificial, el internet de las cosas (IoT) o el 5G.
Estos avances tecnológicos impulsan la competitividad, además de criterios de sostenibilidad ambiental y social. Y aquí es donde nace lo que la Comisión Europea ya ha bautizado como Industria 5.0, un nuevo modelo más sostenible y centrado en las personas, basado en una industria más digital y competitiva, y apoyado en el desarrollo de infraestructuras más inteligentes y eficientes.
La innovación es el camino para hacer de la industria un sector más sólido, y que la Industria 5.0 sea una realidad. En este sentido, GMV propone trabajar con tecnologías que impulsan la transformación digital y la sostenibilidad, focalizándose en el desarrollo de proyectos con un alto componente tecnológico en tres grandes áreas: la automatización, la digitalización y la ciberseguridad.
Si hablamos de automatización, GMV centra su actividad en el desarrollo, implementación y mantenimiento de sistemas y equipos industriales que recogen y procesan los datos que reciben desde sensores, células, cámaras, transmisores de campo y diferentes tecnologías que pueden incorporar, como la visión artificial y la inteligencia artificial, para lograr la eficiencia y optimización de los procesos productivos. Para ello, trabajan en tres líneas de actividad dentro de la robótica: la colaborativa, la industrial y la autónoma.
Las ventajas que aportan estas aplicaciones robóticas en los diferentes sectores productivos son evidentes, ya que permiten realizar acciones que por sus características en cuanto a repetitividad, dificultad y tiempo de ejecución son complejas de realizar para las personas. Este proceso de automatización implica mejorar los tiempos de ciclo, la productividad, la calidad del proceso y la competitividad de la empresa, además de empoderar a las personas para que se centren en las actividades que pueden aportar más valor.
Algunos ejemplos de proyectos en los que trabaja GMV son:
- Brazos robóticos (con pinzas y garras integradas) para el montaje de componentes o pruebas de laboratorio, colaborando de manera eficiente con humanos, y reduciendo la fatiga y los accidentes al sustituir las personas por máquinas en trabajos que pueden ser peligrosos o perjudiciales para la salud.
- Robots autónomos para disminuir la pérdida de tiempo que requiere desplazar los materiales en la gestión de un almacén o en el control del material. Estos robots también los emplean para tareas de inspección, tanto indoor como outdoor, pudiendo navegar de forma autónoma a lo largo de una instalación para comprobar el correcto estado de las instalaciones.
- Cobots para tareas de pick & place, manipulación y clasificación de piezas o materiales a gran velocidad con un alto grado de precisión y repetitividad en cadenas de producción industrial.
Una industria eficiente y resiliente
La relación entre la automatización y la inteligencia artificial nos está acercando el futuro tecnológico a la humanidad, ofreciéndonos una industria más eficiente y resiliente. Estas tecnologías han evolucionado hasta un nivel de sofisticación tan sorprendente para la mente humana que permite a las máquinas ser capaces de retroalimentarse para mejorar y optimizar los procesos industriales, o incluso anticiparse a los fallos que se van a producir.
A través de los últimos avances en IA, GMV ha conseguido predecir un acontecimiento desfavorable en una industria, permitiendo optimizar los recursos y solucionando con suficiente antelación las posibles incidencias o anomalías que pueden provocar elevados costes en reparaciones, tiempos de inactividad o cualquier otro inconveniente que pueda afectar directamente a los empleados y clientes.
Además, apuestan por la virtualización, para que los clientes tengan acceso remoto a los equipos analíticos y puedan realizar ensayos, consultas y gestión de la información de manera remota. Esto permite recrear escenarios similares a los que ocurren en las instalaciones industriales, para poder validar y contrastar de una manera ágil y eficiente estas tecnologías antes de dar el paso de su implantación.


