El robot da fiabilidad al proceso, tranquilidad en el entorno y calidad al producto acabado”
Idasa intervino en la integración de los primeros robots que se instalaron en España. ¿Qué nos puede contar de esos inicios?
Apostamos por entrar en un nuevo mundo, por la potencia, limpieza y fácil programación de la nueva máquina. Todo era nuevo, no había ninguna experiencia en España de cómo manipular un cigüeñal de motor, una bomba de agua o un palier de transmisión.
Los retos más importantes se resolvían con la imaginación y sobre todo con la destreza de los ingenieros predecesores de cada reto.
Empezamos a ver la cantidad de aplicaciones que podía tener, sobre todo en la industria del automóvil y su industria auxiliar, así como el gran número de componentes que podíamos mover de un sitio a otro sin peligro para el operario, con precisión y repetitividad en la toma y dejada de aquellas piezas.
¿Hay algo que en 1979 fuera impensable en el sector de la robótica que ahora se esté volviendo imprescindible?
En aquella época los robots se encerraban en jaulas para no dañar al operador; hoy la tendencia es de colaboración. Por aquel entonces, los operarios veían a los robots como una amenaza para su puesto de trabajo. Pero nuestra experiencia fue reveladora: al cabo de dos años, ningún delegado de los trabajadores en el comité de dirección entendió que se comprara una máquina sin la aplicación de un robot. Aceptaron rápidamente que el robot era su compañero, que les rebajaba el esfuerzo físico y daba fiabilidad al proceso, tranquilidad en el entorno y calidad al producto acabado. Los robots no quitan puestos de trabajo; trabajan para ti y tú tienes que mantenerlos y apreciarlos. Cuando en un robot veíamos un nombre grabado con rotulador o pintura en el eje de cuatro, sabíamos que había sido aceptado y que nunca tendría un día malo. Los bautizaban con nombres como Manolo, Jaén, El Cuervo, Valentín y, sobre todo, Pepe.
¿Cómo describiría en un tuit qué es una célula robotizada?
Una célula robotizada comprende todo el entorno necesario para realizar una parte del proceso productivo de una pieza o elemento.
Si tuviera que elegir un único proyecto desarrollado por Idasa en 2019, ¿con cuál se quedaría?
Por su carácter innovador, desde luego me quedaria con el primer parking náutico de embarcacions de recreo.
¿En qué consistió?
Diseñar un parking de vehículos es complejo, perono tiene nada que ver con automatizar una marina seca que puede almacenar 220 embarcaciones distintas. El objetivo es que el cliente tenga su embarcación preparada en el mar en menos de diez minutos tras solicitarlo mediante app. Para hacerlo posible, hemos analizado las distintas condiciones del mar y los parámetros de más de 426 embarcaciones, como posición de trimado, esloras o distribución de pesos. A continuación, hemos diseñado cuatro brazos robotizados distribuidos en la zona de toma de embarcación para subir sin problemas de peso, oleaje o nivel del mar, capaces de dejar el barco en una paleta que lleva la embarcación a una mesa de descensión a cuatro metros bajo el nivel del mar. Mediante un transelevador robotizado, ubicamos el pallet en el lugar más adecuado en función de las salidas de la embarcación.
Además, los robots externos disponen de sistemas de control de peso mediante célula de carga y sistemas de autocontrol y comunicación para saber dónde se ubican y en qué estado están las otras unidades. Durante la noche, un sistema de control inteligente se encarga de reordernar la disposición de las embarcaciones para optimizar el proceso de salida. Todo ello sin que trabaje ninguna persona dentro del aparcamiento, por motivos de seguridad.
Imaginemos que somos una pyme interesada en instalar una célula de microperforado láser. ¿Cómo empezaríamos a trabajar con Idasa?
Lo primordial es que el cliente conozca cómo necesita que sea su acabado final y los parámetros del proceso. Con eso y unas especificaciones de tiempo de ciclo y respetabilidad nos ponemos a trabajar en equipo. Ofrecemos a nuestros clientes la máxima flexibilidad para que puedan continuar con su negocio. Nuestro departamento comercial se desplaza al país que nos ha realizado la consulta y toma los datos necesarios para hacer una prueba física en el propio material del cliente. De esta forma, puede determinar si la calidad y el proceso es el que realmente precisa para su fabricación.
¿Hay algún sector que se esté incorporando recientemente a la automatización?
La alimentación es uno de ellos. Idasa participa en el proyecto Agronauta, que está en fase de pruebas y consiste en un robot móvil que se mueve por un invernadero de tomates, localiza el producto mediante un sistema de visión, comprueba si está en proceso de maduración y selección, lo identifica, busca el tallo de la planta y lo corta a través de un sistema Waterjet con agua a altísima presión. Finalmente, una bandeja lo recibe para su comercialización.
¿Cuáles son los datos más importantes que tenemos que extraer de un sistema automatizado de producción?
Datos, datos y más datos, ¿realmente son necesarios? Su obtención es inútil si no contamos con sistemas que los analicen. Si hablamos de un sistema robotizado y de sus periféricos, en Idasa nos centramos en los datos que influyen en el proceso de producción, calidad, coste del proceso y vida de los elementos que utilizamos para la fabricación. Centramos nuestros esfuerzos en el mantenimiento y la reducción de los tiempos de parada.
“Los sistemas robotizados han convertido a España en uno de los países en los que más confían los sectores del automóvil y la aeronáutica”.
El año pasado Idasa abrió una sede en Estados Unidos. ¿Qué balance hacen de esta presencia en el mercado americano?
Estados Unidos es un mercado potencialmente preparado para absorber gran cantidad de máquinas y procesos productivos. Hemos empezado a exportar y construir partes de máquinas principalmente en los campos en los que estamos más preparados y disponemos de más experiencia. El resultado, lógicamente, es muy positivo.
A nivel global, ¿cómo está posicionada la robòtica diseñada o implementada en España?
Disponemos de uno de los parques de robòtica más importantes del mundo, en concreto, el número doce. Gracias a las diecisiete industrias automovilísticas que hay en España, hemos tenido la oportunidad de aplicar e implantar sistemas robotizados que, enmi opinión, nos han convertido en uno de los paísesen los que más confían los sectores del automóvil y la aeronáutica. La entrada de las soluciones colaborativas permitirá la implicación de industrias pequeñas y medianas para resolver procesos y entrar en el mundo de la robótica industrial y de servicios.